Los siguientes comentarios son opiniones de los internautas, no de eldigitalsur.
No está permitido verter comentarios contrarios a las leyes españolas o injuriantes.
eldigitalsur se reserva el derecho a eliminar los comentarios que considere fuera de tema.
No está permitido realizar publicidad a través de los comentarios
Los comentarios enviados no se publican siempre al instante, depende de la hora pueden tardar en publicarse.
Para que pueda ser publicado su comentario, por favor escriba un nombre de autor
Publicidad
Arona 11 de Enero de 2014
Dejar huella quería
y el tiempo se acaba
Hay muchas formas de morir y de vivir para
siempre. No intentes buscar una explicación
a las cosas que suceden en la vida, porque
no la tienen. Somos el comportamiento de
nuestros ancestros que están caminando por la sangre que corre por nuestras venas.

Más de 100 libros leídos, 8 discos grabados y volando por el mundo, un libro en la Biblioteca de la Universidad de La Laguna, otro libro que publico en Marzo, más de 1000 conciertos, más de 10.000 horas de guitarra, medio mundo recorrido y se me han olvidado montón de historias. Creo que no he perdido el tiempo. ¿Por qué motivo escribo esto? Para fomentar aprovechar la vida, para chulearme, porque me da la gana, para que lo sepan los envidiosos, para hacer inventario del tiempo aprovechado, para demostrarme a mí mismo que todavía faltan muchas cosas por hacer.
Mi hija lee una media de 100 libros al año y lleva más de 1000 en 15 años, sin contar los del colegio. Escribo esto para chulearme, es decir, que nadie descubra la pólvora. Si algo agradezco a la vida, es haber conocido a tantos hijos de la gran madre, porque con ellos aprendí tanto tanto, que no saben cuánto.

La verdad es la mentira a la que estamos acostumbrados. La verdad es que amamos la vida, cuando vivimos los mejores momentos, especialmente los momentos del amor. Cuando era niño, odiaba esta palabra de los mayores, pero ha pasado el tiempo y las comprendo perfectamente.

Estamos vivos sólo cuando sentimos o se nos presentan emociones como el dolor, la angustia, la alegría o el cansancio del alma por la rutina diaria del pensamiento y la razón que solo necesitan de una orden para dejar de sentir, pensar y razonar así que preguntémonos de nuevo: ¿ESTAMOS VIVOS?

Inconscientemente vamos acumulando energía igual que los volcanes y reventamos cuando la naturaleza nos obliga escupir el fuego.
Y para terminar la carta de hoy les digo que si encuentras el fuego, intenta mantenerlo encendido para que no se apague. El tiempo que dure, será el tiempo que vivirás su calor. Gracias por leer y compartir mis pensamientos.

Juan Santana