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Arona 8 de Octubre de 2014
El Ébola, sí que es
un tema peligroso...
Son tantas las noticias, los temas, sucesos
e historias por segundo. Pero la gran mayoría
de las noticias públicas ya llevaban muchos
años recorridos, como el caso de Jordi Pujol,
porque son treinta y cuatro años pasados
por el forro sabiendo esto muchos de sus conocidos,
ya que los amigos no existen en los negocios sucios,
porque la suciedad de la sociedad, es pura y dura basura negativa para la moral casi perdida en una sociedad, que prácticamente no nos queda casi nada por ver o escuchar.

Cuando lleguen los carnavales, las murgas intentarán hacer reír y ganar con buenas letras, con sus melodías y una puesta en escenario de aquella mejor forma posible, pero es obvio que los temas están en bandeja y ninguna sorprenderá con temas pasando olímpicamente de un Urdangarín, de Rajoy, del petróleo, de Soria, de Jordi Pujol, del Ébola o de la comidilla que va cambiando semanalmente en todos los medios de comunicación, para un pueblo que esté entretenido berreando en los bares o cualquier punto de encuentro.
Es más de lo mismo con el bombardeo televisivo, periódicos de papel, redes sociales, radios y bares, y al final algunos estamos tan saturados que terminamos dando un corte de manga a todos. Cuando hablamos de la babosería del tema del petróleo, olvidamos el hospital del sur que es un tema cuando algún periodista escribe o algún político oposicional saca para seguir dando la tabara y presumir de ser un luchador por esta sociedad y todos sabemos que el gran sueño es ganar elecciones por los votos y pactos y llegar al poder para poder poder.

Vivimos bien aquellos que de vez en cuando nos sentamos a tomar algo en cualquier terraza para arreglar el mundo y en cuanto haya un despiste de los acompañantes, miraremos el whatsapp a ver si alguien envió algún mensaje o una estúpida foto y sino enviamos un mensaje al primero que trinquemos.

¿Qué última noticia es la que lleva la comidilla en España?, con toda seguridad es el Ébola, porque esto sí es un problema grave, gravísimo y aquí si jugamos una carta grande, donde podemos perder mucho y como siempre digo, me molesta la palabra podemos. El Ébola espero que tenga un pronto final, porque jugamos con el pan más divino, el turismo y con el turismo no se juega con esta broma de mal gusto.

Los ciudadanos de a pie, como este que escribe, no somos ministros de sanidad, ni de defensa ni de nada, somos simples charlatanes que hablamos sin parar todos los días o estamos escribiendo pensamientos y muchos dijimos, que era un gran error traer a los dos enfermos a España. Era mejor dejarlos allá hasta que las cosas apaciguaran que bastantes ilegales entran todos los días por mar tierra y aire, pero… ¿Quiénes somos nosotros los ciudadanos de a pie, para dar ideas u opiniones a unos gobernantes que están para hacernos felices a todos? ¿Felices? ¿El trabajo o la obligación de los gobernantes es hacer felices a los votantes de su espacio?

Seguro que los partidos siempre han querido hacer y ser felices, pero por nuestra sangre pasean los malvados de las almas ancestrales que si o si, siempre tocarán las pelotas por cualquier motivo y por costumbre nos amargamos los unos a los otros, como yo los he amargado. En muchas partes del planeta viven hambrunas, guerras o cualquier problema sin querer y en las partes que podíamos vivir bien, nos buscamos los problemas y nos ponemos a parir los unos a los otros. Cuando no es luchando a favor del aborto, otros luchan porque no quieren a mujeres embarazadas en sus empresas, o a favor del petróleo o en contra. ¿Quién da más? ¡Más noticias digo! Gracias por estar ahí y regalarme vuestro hermoso tiempo y espero seguir reflexionando más cada día, aunque tengo claro que los que están bien, están bien y los que están mal ajo y agua. Un abrazo…

Juan Santana