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Tenerife 10 de Mayo de 2014
El Cabildo entrega
la Medalla de Oro
de la Isla de Tenerife
a Ricardo Melchior
Navarro
El expresidente de la Corporación insular y senador ha contribuido de manera decisiva a la mejora y avance de Tenerife.
El presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, entregó este jueves, la Medalla de Oro de la Isla de Tenerife a Ricardo Melchior Navarro, quien se ha caracterizado por su vocación de servicio público y defensa de la Isla a lo largo de su trayectoria política, destacando especialmente su labor como presidente de la Corporación insular –cargo que desempeñó durante 14 años- y como senador, contribuyendo de manera decisiva a la mejora y avance de Tenerife.
El acto se ha desarrollado en el Salón Noble del Cabildo y ha contado con la presencia de numerosas personalidades de la vida política, social y cultural de la Isla, así como familiares y amigos del homenajeado.
Durante su intervención, Carlos Alonso ha destacado la figura del expresidente y tinerfeño durante su dilatada trayectoria política. “Lo inacabado no es nada”, comenzó Alonso, para recordar que esta frase del filósofo suizo Henri-Fréderic, “tan obvia y simple a la vez me hace hoy reflexionar sobre la figura de Ricardo Melchior. Un hombre que llegó a la política por casualidad y que ha logrado, tras su paso por el Cabildo, la consideración y el respeto de nuestra gente, a quien ha dedicado los mejores años de su vida y con mucho aún por aportar. El esfuerzo, coraje y tesón por cumplir sus objetivos, sorteando obstáculos y dificultades, es todo un ejemplo para quienes consideramos que el servicio público es el mejor de los oficios, para el que vale la pena cualquier sacrificio”.
“Después de haber tenido la oportunidad de trabajar a su lado unos cuantos años, he descubierto que su empeño, su tenacidad y ese tesón, han sido sus mejores aliados; los que siempre le acompañaron y evitaron que desfalleciera; los que le ayudaron a no bajar la guardia, a no rendirse. Esa firmeza para culminar lo que había comenzado es en definitiva, la esencia de Ricardo. Ese empeño e insistencia, con algunas dosis de paternalismo, forman parte de su ADN. Y esa era la solución al problema. Ese es el significado de: “Lo inacabado no es nada”. Que el éxito está en la lucha. Y Ricardo ha sabido librar la mejor batalla: la de la constancia”, aclaró Carlos Alonso.
Para el actual máximo mandatario insular, el éxito de Ricardo Melchior “tiene que ver más con la actitud, la ilusión, la pasión y el amor que se le pone a las cosas que uno hace. Es cuestión de creer y querer porque solo así, lo imposible se convierte en factible y todo aquello en lo que ponemos nuestro esfuerzo termina por suceder”.
Asimismo, Carlos Alonso aseguró que Ricardo Melchior “ha sido capaz de encajar en su cerebro los 2.034 kilómetros cuadrados que mide la superficie de Tenerife. En su cabeza guarda todas las carreteras, caminos, galerías, roques y montañas de la Isla. Cada pueblo, cada barrio y cada calle. Todo ello con sus hombres y mujeres. Con las personas de esta Isla, que es lo que más feliz le hace”.
Por su parte, Ricardo Melchior dijo que recibir esta distinción –que comparte con otros seis destacados tinerfeños- “supone, indudablemente, un gran honor para mí, que acepto y asumo como una responsabilidad con Tenerife y de ahí que quiero considerarla más que como un mérito personal, como un reconocimiento al trabajo en equipo durante más de 26 años, que he tenido el placer de compartir con todos los consejeros y consejeras del Cabildo de todos los grupos políticos y además durante 12 años con el Presidente Adán Martín. Todos o casi todos han sido hombres y mujeres comprometidos con Tenerife, con su territorio y con su pueblo”.
“Hemos trabajado juntos para convertirnos en una sociedad del conocimiento, una economía dinámica y competitiva; capaz de un crecimiento económico sostenido, acompañado de una mejora cualitativa y cuantitativa de empleo y con una mayor cohesión social. Junto con las infraestructuras adecuadas, que nos conviertan en un territorio atractivo en la economía mundial. Estamos consiguiéndolo, a pesar de las desfavorables condiciones del contorno”, señaló durante su intervención el expresidente del Cabildo.
Ricardo Melchior también indicó que “hemos aprendido del siglo XX, que todo lo que hemos logrado o haya logrado una sociedad: la libertad, el progreso, etc. no es alcanzado ya definitivamente (sobre todo el progreso). No es algo que no podamos perder. Es algo que para mantenerlo tenemos que estar vigilantes y actuar como ciudadanos responsables”.
Finalmente, Ricardo Melchior tuvo palabras de recuerdo y agradecimiento para “personas esenciales y sin cuya ayuda, apoyo y comprensión nada me sería posible. Gracias a mi mujer Sabela y a mis hijos Nicolás y Ricardo, que no solamente han aceptado mi dedicación al Cabildo y a los tinerfeños, sino que en todo momento lo han apoyado. A mi familia, madre, hermanos, cuñadas y cuñados, así como a mis buenos amigos, que contribuyen a darle sentido a la vida. A todos ellos, muchas gracias”.
Medalla de Oro de la Isla de Tenerife
La Medalla de Oro de la Isla se concede a personas físicas y entidades sociales de cualquier orden con el fin de premiar los especiales merecimientos y servicios extraordinarios que hayan contribuido al beneficio moral o material de la Isla de Tenerife.
Ricardo Melchior Navarro nació en Santa Cruz de Tenerife el 18 de febrero de 1947. Está casado y es padre de dos hijos. Realizó sus estudios en el colegio Alemán de Tenerife y en el Instituto de Enseñanza Media de Santa Cruz de Tenerife; finalizados éstos se decanta por estudiar ingeniería industrial y con ese objetivo pone rumbo a la Universidad de Navarra. Culminada con éxito su carrera en España decide estudiar Ingeniería Superior en Economía en la Escuela Técnica Superior de Aquisgrán obteniendo para ello una importante beca del gobierno alemán.
Finalizados sus estudios en 1977 regresa a Tenerife y es nombrado director gerente de CAPSA, empresa encargada del Puerto de Santa Cruz de Tenerife; en este puesto permanecería durante cuatro años para pasar luego a ocupar la jefatura regional de energías renovables y proyectos de investigación en la empresa Unelco.
En las elecciones autonómicas de 1987 obtiene su primer acta como consejero insular y es nombrado por el presidente Adán Martín, vicepresidente del Cabildo de Tenerife; cargo que compaginó con los de consejero insular de Planificación y Desarrollo Económico (1987-1991), Agricultura y Desarrollo Económico (1991-1995) y Agricultura y Aguas (1995-1999).
A partir de 1999 asume la presidencia del Cabildo de Tenerife al liderar la lista más votada en las elecciones autonómicas de ese año. En 2003 repite candidatura y repite victoria electoral, ocurriendo lo mismo en las elecciones de 2007 y 2011. En ese sentido, hay que señalar que Ricardo Melchior ha sido el presidente que mayor apoyo electoral ha recibido en la historia democrática del Cabildo, con más de 170.000 votos en los comicios celebrados en 2003.
En el año 2004 es elegido senador por la isla de Tenerife compaginando dicho cargo con el de presidente del Cabildo hasta la finalización de la VIII Legislatura. El senador Melchior abordó numerosos temas que afectaban no sólo a Tenerife sino a Canarias en general. Desde la problemática sísmica y atmosférica hasta la situación de la inmigración clandestina pasando por la tragedia de los incendios forestales y planes específicos contra la contaminación marítima.
No olvidó reclamar la restitución de nuestros bienes patrimoniales ni dejó de realizar gestiones para la financiación de numerosos proyectos entre los que destaca el Tranvía de Tenerife, el Puerto de Granadilla, la zona franca abierta para Tenerife o la agilización de las obras hidráulicas previstas para Canarias y la licitación de las desaladoras de Granadilla y Guía de Isora. Las actas de la Cámara alta dan cuenta de su intensa y extensa actividad siendo entonces destacado por sus 2.034 propuestas e iniciativas.
La labor de Ricardo Melchior en el Cabildo de Tenerife es amplísima, con numerosos logros que han beneficiado a la Isla. De su mano la empresa Cultesa se convirtió en referente de innovación agrícola, posicionándose a nivel nacional e internacional y actuando como aliado estratégico para el desarrollo y consolidación de la agricultura de todo el archipiélago canario.
La agricultura tinerfeña fue siempre una preocupación para Ricardo Melchior. Su resurgimiento y su puesta en valor es obra directa de su voluntad firme; las bodegas comarcales, los cultivos de las medianías de Tenerife y la Casa del Vino son piezas fundamentales y estratégicas del Plan Insular Vitivinícola creado bajo su mandato. El Plan Apícola, con la Casa de la Miel y la unión de los apicultores de Tenerife, génesis de lo que es hoy nuestra orgullosa miel, un producto único, reconocido por la Unión Europea con una denominación de origen de las que sólo existen tres en el Estado español.
El sector ganadero, uno de los más vulnerables en las sucesivas crisis económicas que nos han venido afectando, ha resistido sin duda alguna por la numantina defensa de la que siempre han hecho gala las políticas impulsadas por Ricardo Melchior. Si Tenerife dispone hoy de queserías, matadero insular y Casa del ganadero es gracias a la labor de su política ganadera. La recuperación y puesta en valor de las razas autóctonas se deben al apoyo a un sector secularmente marginado y olvidado. La integración de la pesca profesional en una organización de productores es otra muestra de lo que para Melchior significaba adaptarse a los tiempos.
La finalización del plan de balsas de Tenerife, la creación del Consejo Insular de Aguas y de Balten la elaboración y aprobación del plan hidrológico de Tenerife, así como que los agricultores dispongan del agua que necesitan, ha sido siempre una prioridad. De ahí la importancia que bajo su dirección se le ha dado a las infraestructuras de regadío gestionadas por Balten.
Desde la Presidencia del Patronato del Parque Nacional del Teide impulsó de manera definitiva el nombramiento del Teide como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, alcanzando dicho galardón el 28 de junio de 2007, habiéndose aprobado una moción institucional en el senado español.
Ricardo Melchior se ha volcado en hacer de la isla de Tenerife una fuente de investigación aplicada para la utilización de energías no contaminantes, ideando un ambicioso proyecto para la isla que comenzó hace más de veinte años y hoy es una realidad orgullosa, el Instituto Tecnológico de Energías Renovables (ITER), del que es presidente, habiendo dirigido importantes proyectos de desalinización de aguas y empleo de energías renovables.
Esta trayectoria en el campo de las energías renovables le ha valido importantes reconocimientos, entre los que destaca su nombramiento, en 2002, como Doctor Honoris Causa en Ciencias por la Universidad Nacional de Irlanda. Del mismo modo recibió de la Presidencia del Gobierno francés, en 2003, la Orden Nacional del Mérito en su rango de oficial, y en 2011 en su rango de comendador, en reconocimiento a las relaciones con la República francesa y, entre otras cosas, el progreso social y ciudadano en el continente Africano.
Recientemente le fue concedida por el Presidente de la República Federal de Alemania la cruz al mérito civil de primera clase. Ha sido miembro fundador del Consejo Solar Europeo, de las Comunidades de Europa para las Energías Renovables (CERE) y de la Agencia Europea de Energía Renovable.
Ricardo Melchior ha sido a su vez el impulsor del proyecto ALIX, iniciativa que ha convertido a la isla de Tenerife en el nodo principal de telecomunicaciones de la costa de África Occidental, incrementando exponencialmente la competitividad de la Isla en el mercado internacional de las TIC. Su participación en la Iniciativa Global Clinton colocó a Tenerife en foros internacionales de gran prestigio compartiendo mesa de trabajo con jefes de estado de las principales potencias económicas. En su empeño por reforzar la conectividad de la isla inició el desarrollo de líneas aéreas directas desde y hacia Tenerife evitando obligados pasos por otros aeropuertos.
Otro de sus objetivos a lo largo de su mandato fue que Tenerife tenga una sanidad acorde con los tiempos, impulsando para ello la creación de los complejos sociosanitarios del Norte y del Sur. La creación y consolidación del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria (IASS) y la potenciación de la Sociedad Insular para la Promoción de las Personas con Discapacidad (SINPROMI) siguen estando hoy a la vanguardia de la defensa de los ciudadanos menos favorecidos, siendo el trabajo en este sector altamente reconocido por colectivos e instituciones. De igual forma, impulsó el programa de dinamización e intervención social Ansina y la puesta en marcha del Centro Insular de Entidades de Voluntariado, desempeñando ambas una función esencial en la sociedad.
La visión estratégica de Ricardo Melchior fue determinante para que el Tranvía de Tenerife sea hoy una realidad que ha beneficiado a Tenerife y su área metropolitana. De igual forma, puso en marcha numerosas iniciativas para impulsar las obras del Anillo Insular de carreteras de Tenerife y los planes de desarrollo e infraestructuras de Tenerife, por ejemplo el plan La Cuesta-Taco.
Las políticas en materia cultural fueron una apuesta constante y bajo su presidencia se han completado la red de museos del Cabildo y se han realizado obras tan importantes como TEA Tenerife Espacio de las Artes y el Auditorio de Tenerife Adán Martín, además de 45 obras de restauración de edificios históricos y declarados Bien de Interés Cultural.
El apoyo incondicional a la Universidad de La Laguna y a la Ciencia en general ha sido una constante en su trayectoria como gestor público, como lo demuestra su apoyo e impulso para la creación del Instituto de Enfermedades Tropicales y Salud Pública de Canarias, la creación del Instituto de Tecnologías Biomédicas, la creación y financiación de la Fundación Biovance de la que fue presidente del patronato, y el apoyo al Campus de Excelencia Internacional de las universidades canarias.
