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Arona 10 de Julio de 2014
Sin distinciones
Por muchos esfuerzos que se han querido hacer en copiar,
o por lo menos estar en la misma línea de todo lo que hacen
los franceses (gabachos), no ha sido posible, vaya usted a
saber el motivo, de momento el temple y la captación de lo que es la justicia que tan bien les va en Francia.

En España no se ha podido ni remotamente compararse con Francia en esa seriedad que imprime ese país, porque su política de Estado es inamovible por muchos cantos de sirena que se les quiera hacer. Posiblemente es que plantaron muchas guillotinas en París y no dejaron escapar a nadie que no estaba en la Legalidad, en la Igualdad y en la Fraternidad.

Por ser de esta forma esa República, el todopoderoso y soberbio Nicolás Sarkozy, ha experimentado el olor y el ambiente de lo que es una comisaria parisina, ya que sin más miramientos que el que se le da a un ciudadano de a pie común y corriente que ha delinquido saltándose todas las reglas que impone la Justicia francesa, igual se le ha tratado a él.
Es normal que esto pase en una Nación que se tiene por ser Justa. A Sarkozy se le acusa de tráfico de influencias y revelación de secretos de Estado, por mucho que este esté apelando en decir que es el expresidente de Francia, ante la Ley no le ha servido y tendrá que responder a estas acusaciones. Estas cosas en España, son menudencias, pelillos a la mar.

Pero en este país tan decidido y tan acelerado que somos, en lo que en su mayoría de veces deberíamos hacer, sigue colgando el caso Gürtel, en donde ahora se ha sabido que se han encontrado facturas falsas en el FAES, de la intocable Jefa de Prensa Ana Cabos, al dedicarse a sus asuntos personales olvidando su trabajo, y que el FAES es una Organización que recibe Fondos Públicos, pues así y todo se giraron facturas falsas, y además a una empresa de Gurtel.

Esto se ha sabido de un informe oficial de la Unidad de Delitos Económicos y Financieros que controla el Ministerio del Interior, en donde es sabido que está como Ministro un colega amigo de Aznar. Hay que recordar que en ese año el Jefe de la FAES, del Gobierno y del PP era José María Aznar.

Pues todo está muy bien, se ha evaporado todo según parece, la Justicia de momento no opina, y habrá que ver si algún fiscal ejercerá la acusación a este caso de malversación de caudales públicos, que es el que parece que tiene este caso con tufillo de delincuencia, aunque acabará por ser una vez mas "pelillos a la mar".

La mayoría de estos casos tan duros y tan agravantes, acaban estando prescritos, después alguien se romperá la camisa cuando vea que algunos núcleos ciudadanos se rebelan contra el sistema. Pero es que hay todo un container de casos como estos que se acumulan y que tiene de denominador común, al Barón de las Azores.

Salvador Barnes
doropress@gmail.com